martes, 17 de diciembre de 2019

The Mule (2018)

Género: Drama      
Dirección: Clint Eastwood     
Protagonistas: Clint Eastwood , Bradley Cooper 
Duración: 110 minutos 
Año : 2018

Conocida es la obsesión de Clint Eastwood por el mundo de las armas, asunto que se ha plasmado además de manera brillante en varias de sus películas durante estas últimas dos décadas (“Flag of our fathers”/“Letters from Iwo Jima”, “Gran Torino”, “American Sniper”). En ese sentido, “The mule” llega a nosotros para sumarse a la lista, abordando una vez más el pasar de un veterano de guerra arisco, apático y desagradable, personificado obviamente por Eastwood, quien se encuentra a si mismo en una solitaria etapa final de su vida, alejado absolutamente de su familia (quienes lo rechazan por siempre haber privilegiado a su trabajo y vida social por sobre sus propias hijas) y que ante el ya “no tener nada que perder” comenzar a ayudar a traficantes trasladando droga por los Estados Unidos. 

Se nos presenta de esta forma una película de excelente ritmo, que se balancea constantenmente entre el buen humor y el drama generando así un equilibrio que en ningún momento de su tramite cansa ni tropieza. Eastwood es astuto en su dirección y no teme en mostrar a su protagonista a ratos egoísta e incluso en otros racista (notable ese breve momento en que se expresa despectivamente frente a una pareja de raza negra) aunque claro, no profundiza demasiado en la psicología de este, más bien centra la película en la cacería que la policía establece sobre su persona y tampoco da cabida a que otro personaje participe de manera relevante en la historia que se nos muestra. 

Nos quedamos así frente a un filme correcto, que entretiene y atrapa pero claramente se queda a medio camino a la hora de analizar la obra completa del actor y director. Una (muy) buena película de Clint Eastwood, quien vuelve a dar muestras de su buena mano pero se queda algo corto a la hora de profundizar en el personaje.

¿Lo mejor? El ritmo de la película, que jamás cansa, y el personaje ´Clint´, que tampoco agota.
¿Lo peor? La sensación de que el personaje daba para más de lo que se cuenta...


3.5: Muy buena. 


lunes, 9 de diciembre de 2019

Once Upon A Time In ... Hollywood (2019)

Género: Acción     
Dirección: Quentin Tarantino     
Protagonistas: Leonardo DiCaprio, Brad Pitt, Margot Robbie
Duración: 150 minutos 
Año : 2019


Seamos honestos: desde hace rato que Tarantino venía patinando. Y no es que sus últimas películas estuviesen bajo la media, pero tanto “Django Unchained” como “The hateful eight” siendo excelentes ambas evidenciaban que el director se quedaba sin ideas por lo que debía recurrir en algunos momentos descaradamente al auto homenaje. En ese sentido, su más reciente película posee el mérito de ir más allá de lo esperado, lo cual de entrada es meritorio. Durante sus primeras dos horas “Once upon a time in ...Hollywood” no te deja nunca claro por donde pretende ir y solamente en recta final Tarantino decide mostrar las cartas. Ahí es cuando plantea una idea más que interesante, como también hizo en “Unglorious bastards” o en la mencionada “Django unchained” decide hacer justicia por sus propias manos y mostrar una historia paralela, esta vez en torno al asesinato de Sharon Tate (Margot Robbie) en la mansión del director Roman Polanski. Insisto: la idea es buena. El problema es que una buena idea por si sola no hace una buena película, hay que saber desarrollarla... 

El caso es que en esta ocasión, durante dos horas Tarantino nos muestra la historia de Rick Dalton (DiCaprio), un actor de western televisivo, que ve como su carrera comienza a apagarse por lo que en medio de su angustia decide, junto a su fiel migo y doble de acción Cliff Booth (Brad Pitt) comenzar a buscar nuevos caminos que le permitan re encontrarse con el éxito. Durante todo este trayecto el director se dará el gusto (¡era que no!) de homenajear al cine de fines de los años 60 que lo enamoró, lo hace desde adentro mostrando rodajes, diálogos entre actores y diversos personajes que seguramente él considera fascinantes (siendo lo más divertido la aparición/ridiculización de Bruce Lee). Sin embargo, el trámite es lento y pesado, con un evidente problema de edición, alargándose demasiado en tomas y planos completamente innecesarios (deben ser entre cinco y diez minutos en total, por ejemplo, con Brad Pitt sobre un auto... ¿para qué?). Pero no solo eso, la trama es vacía, llena de historias y personajes que jamás se profundizan. Y es que la carta de amor que Tarantino ha desarrollado por el cine se come absolutamente todo, y esto merma claramente al guión de la cinta. 

De ahí que cuando la película ya piensa acabar, se viene la acción, con violencia explícita (sin distinción de género) y todo aquello tan característico del autor. Esos 20 minutos nos traen de vuelta y casi logran que nos olvidemos de todo el tedio previo. Pero no, ni la acción ni ese perro fantástico que se roba la película en el par de escenas en que aparece, logran rescatar lo más bajo que ha filmado Tarantino en su carrera. 

¿Lo peor? El terrible desarrollo de la historia. Lento y pesado. Demasiadas vueltas para no profundizar absolutamente nada.
¿Lo mejor? Un par de escenas que te despiertan (Cliff Booth Vs Bruce Lee y Dalton en su camarín furioso consigo mismo), el perro, la escena violenta en el desenlace y todos los aspectos técnicos (fotografía, música, etc)


2.5 : Te arriesgas.


Otras películas de Tarantino:
2015: The hateful eight
2012: Django unchained2007: Death proof

lunes, 25 de noviembre de 2019

Dolor y Gloria (España, 2019)

Género: Drama    
Dirección: Pedro Almodóvar     
Protagonistas: Antonio Banderas, Asier Etxeandía, Asier Flores, Leonardo Sbaraglia, Penélope Cruz.
Duración: 110 minutos
Año : 2019

En su línea habitual, el fantástico Pedro Almodóvar ha vuelto a entregarnos una buena historia centrada en las complejas relaciones que se generan entre seres humanos. Es el foco del español, desnudar a un personaje frente a nosotros, mostrarnos sus miedos y emociones pero también enseñarnos que es lo que lo ha llevado hasta allí. De esta manera conocemos a Salvador Mallo, un cineasta reconocido y exitoso pero cuya vida es un infierno, el hombre oscila entre dolores físicos y una fragilidad psicológica importante, la cual lo ha marginado del trabajo por lo que lo vemos constantemente deprimido al interior de su impresionante casa. Salvador lo tiene todo y nada a la vez. Desde aquí la película se dividirá en distintos capítulos que nos ayudarán a armar el puzzle de su vida. Conoceremos su infancia y relaciones de distinto tipo (de pareja, con su madre o con un actor que alguna vez protagonizó unas de sus películas) y su lucha contra sus peores fantasmas. 

Con un uso de los colores realmente espectacular y un reparto de actores de primerísimo nivel (Antonio Banderas desarrollando su mejor papel en años, si es que no el mejor de su carrera) “Dolor y gloria” es una interesante historia que se construye paso a paso (la película se toma su tiempo) y nos mueve a reflexionar respecto a cuanto pesa el enfrentar nuestros grandes temores y cuanto cuesta el no sumergirse en las depresiones, el no dejarse caer. Lo curioso es que esta vez (como pocas veces en su carrera) el protagonista ha sido un hombre. Y es que claro, todos entendemos que Almodóvar nos está hablando de si mismo.  

Habrá quienes critiquen el ritmo de la película y que “no pase nada”. Que durante casi dos horas no nos encontremos con ningún quiebre forzado que te vuele la cabeza ni un epílogo que te deje con la boca abierta. Y está bien. En la misma película el director nos lo advierte cuando el protagonista menciona que “los mejores actores son aquellos capaces de resistir la tentación del llanto”. Y si, que también los mejores directores son quienes te emocionan sin necesidad del recurso fácil, de aquello Almodóvar vuelve a dar cátedra en “Dolor y gloria”. Que no es la mejor película que le haya visto, quizás ni siquiera entra en un top 10 de su lista pero aún así me ha parecido fantástica. 


4.0 : ¡Excelente!

Otras películas de Pedro Almodóvar:
2016: Julieta
2013: Los amantes pasajeros 

domingo, 3 de noviembre de 2019

Cabros De Mierda (2017, Chile)

Género: Drama    
Dirección: Gonzalo Justiniano    
Protagonistas: Natalia Aragonese, Daniel Contesse, Elias Collado.
Duración: 120 minutos
Año : 2017



El horror de la dictadura chilena (1973-1990) ha sido retratado por el cine en múltiples ocasiones y desde distintas miradas. Esta es una más, una que ha intentado desde las entrañas mismas de lo popular entregar una visión respecto a la violencia y terror por el que tuvo que pasar parte del país por aquellos años. Se nos muestra por tanto la historia de Samuel, un estadounidense que llega a la población “La Victoria” a evangelizar, internándose poco a poco en la realidad de su gente, en el día a día, las persecuciones, temores, silencios y la resistencia puesta al régimen. En este camino conocerá a Gladys (fenomenal Natalia Aragonese), una joven fuerte y luchadora que convive con su madre, hija, más otras mujeres y niños que por distintas razones no cuentan con sus padres. Poco a poco Samuel irá conociendo el concepto de comunidad en la convivencia con la población pero de igual forma vivenciará el miedo en primera persona.

La historia es cruda, con momentos duros que plasman de buena forma lo que la dirección ha querido mostrar, sin embargo, de igual forma la película peca en su falta de ritmo, sobretodo durante su primera mitad (en los 60 minutos iniciales), con un serie de escenas que se extienden demasiado y un ir y venir entre Samuel y Gladys que avanza demasiado lento. 

Ahora, dentro de lo positivo, fuera de la crudeza del relato, sobretodo el lo visual (la violencia de la dictadura está bien representada), las actuaciones son un punto fuerte, fuera de sus dos notables protagonistas, la figura de un niño (Elias Collado) cumple al enternecer la pantalla en cada una de sus apariciones, aportando una necesaria baja de tensión frente a una historia que todo el tiempo se muestra densa. 

“Cabros de mierda” (La francesita, fuera de Chile) es una película triste y dolorosamente necesaria, que deja la sensación de que con un poco más de ritmo en su narrativa podría haber llegado más lejos.

¿Lo mejor? La crudeza del relato en su hora final. 
¿Lo peor? Su primera mitad, la presentación del contexto es demasiado lento.
¿Donde la encuentro? Https://vimeo.com/235464617 (clave: cabroschile2018)


3.0: Buena, se deja ver.

martes, 15 de octubre de 2019

Joker (2019)

Género: Drama    
Dirección: Todd Phillips    
Protagonistas: Joaquin Pheonix, Robert De Niro   
Duración: 120 minutos
Año : 2019 


Ya lo decía Rubén el 78’: “La vida te da sorpresas. Sorpresas te da la vida...”

Si en 2010, un par de años después del éxito absoluto de “Batman: The dark knight”, alguien me hubiese dicho que una década más tarde el director de la saga cómica “The hangover” estaría tras una película que nos haría olvidar por un rato el mítico registro de Heath Ledger, obviamente no me lo habría creído. Pero acá estamos, sorprendidos todos antes esta bofetada de película que acaba de llegar a nosotros. Una verdadera maravilla moderna que algunos ya se han atrevido a colocar a la altura de clásicos tales como “Taxi driver” de Martin Scorcese o “La naranja mecánica” de Stanley Kubrick. Y bueno, el tiempo dirá.

Pero impresiona el fenómeno, sobretodo considerando el que la película aborda un personaje ya varias veces trabajado en el pasado y del que creíamos, tras la obra de Nolan en 2008, haber recibido su mirada definitiva. Sin embargo, la dirección de Todd Phillips ha sido capaz de aportar su matiz y mediante una filmación que rosa el cine de autor, apoyándose en un uso impecable de colores, iluminación, fotografía y música, nos ha entregado una mirada humana del Guasón pero que al mismo tiempo (y he ahí su principal mérito) logra conectar con nuestro mundo y su falta de empatía hacia quienes son, por la razón que sea, diferentes. En un mundo donde todos/as quieren ser uno/a más y añoran pertenecer, una película cómo “Joker” se vuelve tan necesaria como potente. 

(Atención: Desde acá,  spoiler descarado) Se nos muestra de esta manera un personaje complejo, depresivo y enfermo, traumatizado por su madre e historia, violentado en el día a día por su imagen de friki, incapacitado para mostrar su sufrimiento mediante lágrimas y más bien explotando en involuntarias carcajadas ante el nerviosismo o la incomodidad. Poco a poco este hombre irá encontrando en la violencia un mecanismo de expresión y junto a él la sociedad irá encontrando un caótico camino conducido por la rebeldía frente aun sistema indolente y fracturado. Y a partir de ahí, los detalles que el guión + dirección + actuación han hecho de esta película un éxito inmediato. Con una narrativa que recuerda por momentos al “Rey de la comedia” (de 1983, protagonizada también por Robert De Niro) la película se desenvuelve de manera elegante tomándose su tiempo para ir subiendo en intensidad, llegando a la acción recién en su media hora final, de la mano de un Joaquin Phoenix sencillamente brutal en su interpretación, tanto física como gestual. 

No todo es perfecto, sin embargo, hay momentos donde Todd Phillips se excede en las explicaciones subestimando por completo al espectador, y en la misma linea se planea una exagerada victimización del protagonista quien incluso imagina cosas, aspecto que en lo personal me pareció absolutamente innecesario y que lejos de sumar, resta bastante puntos a la cinta. Con todo, "Joker" se muestra como una película notable y que pese a sus mermas esperamos senté un precedente respecto al cine de historietas que tanto ha proliferado durante esta década. 

¿Lo bueno? Joaquin Phoenix y todo su desplante físico/emocional. 
¿Lo malo? El exceso de victimización del protagonista, es demasiado y aquello resta. 

4.0 : Excelente.

Otras películas de Joaquin Pheonix:

jueves, 26 de septiembre de 2019

Araña (Chile, 2019)

Género: Drama    
Dirección: Andrés Wood   
Protagonistas: Marcelo Alonso, Mercedes Morán, María Valverde, Felipe Armas 
Duración: 120 minutos
Año : 2019 


De regreso uno de los grandes directores del cine chileno. Y vuelve mejor que nunca, demostrando una madurez importante a la hora de narrar, asunto que ya se había adelantado en ”Violeta se fue a los cielos” (2011). Y si en ocasiones anteriores Andrés Wood había abordado al Chile quebrado a partir del golpe militar ocurrido en 1973, cuando lo hizo el resultado, mirado con quince años de distancia, me parece algo caricaturezco (Machuca, 2004) e instalado en el pasado, a diferencia de esta ocasión,  donde el director ha decidido impactarnos trayendo esa historia a nuestro presente, de manera tan cruda como audaz. 

De esta forma, el Wood realiza un enlace presente-pasado, contándonos la historia de un grupo de miembros de la organización nacionalista Patria y Libertad, su actuar como oposición violenta durante el gobierno de Salvador Allende Gossens (entre 1970 y 1973) y el como estos personajes se reencuentran en el Chile actual, mostrándonos que ha sido de ellos y como se desenvuelven en 2018. Ahí el filme diferencia claramente entre aquel ser que fue evidentemente utilizado y se perdió nadie sabe donde tras toda esa historia (encarnado por Marcelo Alonso) y aquellos que supieron instalarse en posiciones de riqueza y poder durante el Chile democrático (los personajes de Mercedes Morán y Felipe Armas), quienes además nos presentan una historia de amor enfermiza, forjada en torno al odio, con intereses creados entre medio y una sensación constante de incredulidad frente a lo que se ve (nunca terminas de dudar en torno a la protagonista y sus reales intenciones). En sentido, el relato de Wood es inteligente y crudo, sórdido y dramáticamente cercano. He sufrido como chileno al reconocer en la película elementos patentes, tanto ese nacionalismo enfermizo y presente en parte de la nación así como una casta de personajes de la aristocracia chilena que desarrolló su poder y riqueza en torno a la absoluta impunidad, sin pagar un costo siquiera respecto a los actos cometidos cuarenta años atrás. 

Mediante un elenco actoral impecable, con el desarrollo de personajes secundarios potentes, una narrativa dinámica y atractiva, “Araña” se enmarca como la película mejor lograda de un Andrés Wood que no ha necesitado de ninguna escena de melodrama fácil para buscar emocionarnos ni impactarnos, más bien ha esbozado ideas incómodas y las ha instalado en pensamiento de manera astuta y sutil. Que decir, enorme.


¿Lo bueno? La escena final y aquello que representa. Maravillosa. 
¿Lo malo? Hay situaciones de la película que son algo forzadas (ejemplo, "el escape del manicomio")
4.0 : ¡Excelente!

Otras películas de Andrés Wood:
2011: Violeta se fue a los cielos

martes, 3 de septiembre de 2019

El Hijo (Argentina, 2019)

Género: Suspenso   
Dirección: Sebastián Schindel   
Protagonistas: Joaquín Furriel, Martina Gusman    
Duración: 90 minutos
Año : 2019 


En general me declaro amante del cine argentino, no por nada son varias las cintas de allá que he comentado aquí en mi querido blog, de ahí que al encontrarme con la breve descripción de “El hijo” y revisar que contaba con Martina Gusman en el elenco, no necesité más para lanzarme sobre la película. ¿Y con qué me he encontrado? Con una historia tremendamente atractiva, actuaciones convincentes y un exquisito manejo del suspenso... además de un desenlace lamentable y para el olvido, de los peores que he visto en mucho tiempo, al punto de lograr arruinarte todo lo que la película previamente había construido de tan buena forma.

Pero, hablemos de por donde va “El hijo”. Mediante un relato que salta en el tiempo constantemente se nos revela una historia más que interesante, la de un pintor adulto, que ronda los cincuenta años y se encuentra en proceso de concepción de un hijo junto a su reciente esposa Sigrid, una bióloga europea que tras lograr quedar embarazada manifiesta su intención de vivir un proceso “al natural”, es decir, totalmente alejado de médicos y procedimientos habituales. En ese sentido, la película abre muy bien metiendo mano a un tema tan actual como las posturas “anti vacunas” que han ido apareciendo durante estos años recientes. De ahí en adelante Sigrid comenzará a dar muestras de un comportamiento delirante y que ronda lo enfermizo, desarrollando desde ahí la película una historia marcada por un notable uso del suspenso que lentamente nos lleva a empatizar con el drama que vive su protagonista (aunque siempre dudamos respecto a su cordura, ahí la cinta también es hábil). En ese sentido “El hijo” cumple con creces durante su trámite con el objetivo de mantenerte ahí, atento, inquieto y al tanto. Pasan los minutos y sientes el estar frente a una gran película de suspenso, sin embargo, no todo podía ser perfecto. 

(Desde acá, spoiler. Vuelve cuando la hayas visto) 
Lamentablemente el desenlace de la historia es tan pobre que es capaz de matarte las pasiones drásticamente. Una real lástima. Nos encontramos así con un guión que decide dar cierre a la película abruptamente sin tomar ninguna postura respecto a nada, dejando cabos sueltos por doquier respecto a asuntos relevantes dentro de la historia. Eso sin mencionar la cantidad de sin sentidos que la película regala:  ¿Una puerta de acero en tu propia casa sin que antes te llamase la atención? ¿Tu mujer se queda seis meses en una habitación con tu hijo y no llamas a la policía? ¿Te meten un juicio por violencia y no entregas antecedentes respecto al trato de la mujer hacia su hijo? ¿No solicitas un examen psicológico para la madre?  ¿Una madre y una anciana en Argentina pese a contar con una causa de asesinato en su contra? iban a salir del país con el niño? ¿Un niño que no sabemos quien es ni de donde aparece... 

Y así, una serie de circunstancias que la película insinúa pero de los cuales no se hace cargo,  dejándonos así una excelente cinta de suspenso que cierra muy pero muy mal. Entiendo que en ocasiones suma el dejar hilos abiertos para que el espectador arme lo que quiera armar pero cuando no te explican nada de lo que se construyó previamente... el asunto suena a burla. 

¿Lo mejor? Que durante 70 minutos te la pasas estupendo.
¿Lo peor? El cierre, terrible. 
¿Donde la encuentro? Está en Netflix. 


3.0: Buena, se deja ver...  

viernes, 30 de agosto de 2019

Rocketman (2019)

Género: Biográfica  
Dirección: Dexter Fletcher  
Protagonistas: Taron Everton, Jamie Bell   
Duración: 125 minutos
Año : 2019 

Me lo temía. Que tras el éxito de “Bohemian rhapsody” comenzasen a llegar a nosotros otros biopics relacionadas con figuras del rock. Y bueno, así ha sido, esto es un negocio y bien sabemos que cuando algo vende Hollywood estira sin asco el chicle cuanto sea posible. Y si meses atrás supimos de “The dirt”, la película de Motley Crue, ahora ha sido el turno de “Rocketman”, cinta basada en (parte de) la vida del gran Elton John y que ha sido dirigida además por Dexter Fletcher, que fue de hecho quien terminó de dirigir “Bohemian Rhapsody” tras el despido de Bryan Singer. En ese sentido, las comparaciones son inevitables, más considerando el que existen puntos no menores que relacionan a ambas cintas. Y es que nuevamente se nos relata la historia de un personaje histórico dentro de la historia del rock, sus idas y venidas tras conocer la fama, su caída en un mundo de excesos, personajes que lo quieren y otros que solamente lo utilizan, y bueno, todo ese cliché que se suele construir en torno al ícono del rock & roll

Donde Fletcher ha intentado, sin embargo, marcar diferencias con “Rocketman” ha sido en el intentar meterse un poco más en la psicología del protagonista, sus traumas de infancia y debilidades, aunque cabe mencionar que la película nunca se adentra en los fantasmas de Reginald Kenneth Dwight (Elton John) como debiese, en su no aceptación, el porque de la necesidad de disfrazarse constantemente sobre el escenario y su dinámica auto destructiva. El filme insinúa todo esto pero lo aborda de manera muy superficial, centrándose demasiado tiempo en los excesos vividos por el cantante, sus borracheras, mal carácter y acercamiento con las drogas. Hay saltos bruscos en la historia que nos dejan con preguntas sin contestar: ¿qué ocurrió en su adolescencia?, ¿por qué siendo homosexual decidió casarse con una mujer?, ¿qué ocurrió ahí dentro?, ¿se reconcilió realmente consigo mismo y su pasado?, ¿qué cambió le permitió abandonar la vida cargada de excesos que llevaba? Y es que tras casi dos horas de relato de pronto nos encontramos con un cierre que se percibe demasiado brusco, dejando más preguntas qué respuestas en un “final feliz” que parece algo forzado.

A destacar en la película la actuación de Taron Everton, que convence absolutamente como Elton, la inclusión de Bernie Taupin (Jamie Bell) en el rol de ángel de la guarda del vocalista pero también como importante artífice del éxito del pianista (esta muy bien qu se le den los créditos que merece en esta historia) y,  por supuesto, el uso de la música dentro del filme, ya que las canciones no solamente suenan sino que son conectadas con algún momento particular de la vida de Elton, encontrando ahí momentazos que se suceden uno tras otro. 

En definitiva “Rocketman” es un biopic entretenido, que cuenta con una banda sonora que habla por si sola y se encuentra muy bien utilizada pero que lamentablemente perdió la oportunidad de adentrarse en los fantasmas de Elton John,  quedándose durante largos pasajes únicamente en la caricatura del rock star, y de eso ya hemos tenido bastante dentro del cine.

¿Lo bueno? El uso de la música, recurso utilizado de manera brillante.
¿Lo malo? Se nos muestra una historia muy cliché, el rock star que toca la fama y su dinámica auto destructiva, algo muy visto ya. No se ahonda en profundidad en la psicología del personaje. 
3.0 : Buena, se deja ver. 



sábado, 10 de agosto de 2019

Glass (2019)

Género: Suspenso 
Dirección: M.Night Shyamalan 
Protagonistas: James McAvoy, Bruce Willis, Samuel L. Jackson, Sarah Paulson, Anya Taylor-Joy 
Duración: 120 minutos
Año : 2019 


No olía bien, digámoslo. Y es que siendo “Split” (Fragmentado, 2016) una buena película, ligar el rollo de los súper héroes a dicho filme pareció bastante forzado, más aún siendo la notable “Unbreakable” (El protegido, 2000) la supuesta “primera parte” de una trilogía que vendría a concluir en este 2019 con la llegada de “Glass”, sin embargo, en el irregular mundo de M. Night Shyamalan sabemos todo puede ser posible, por lo que por más extraño que resulte, el director se las arregló para juntar en pantalla a David Dunn (Bruce Willis, más inexpresivo que nunca, lo cual es mucho decir) y a “la bestia” Kevin Bendler (James McAvoy). La excusa fue el concertarlos en un psiquiátrico donde una doctora (Sarah Paulson) intentará convencerlos a ambos de que no son seres con poderes especiales sino que humanos comunes y corrientes con un desorden mental. Y bueno, desde ahí se desarrollará un guión bastante ágil, con un buen manejo del suspenso aunque con una cantidad de baches que le restan bastante al global.

Dentro de lo positivo se encuentra el ritmo de la cinta, que se disfruta sin problemas, incluso durante su primera mitad entregando buenas dosis de suspenso, generado principalmente por un James McAvoy que sostiene gran parte del peso de la película con sus caras y gestos por millón, aunque Samuel L. Jackson también aporta con su papel. Ahora, lamentablemente el filme lentamente comienza a incurrir en una cantidad de absurdos no menores, con un inicio que roza el ridículo (David Dunn es una especie de Batman urbano que es guíado por su hijo), apariciones que no se entienden ni se justifican en absoluto (el personaje de Anna Taylor-Joy está metido totalmente a la fuerza, lo mismo con a madre de Mr. Glass) y un final con giro inesperado marca de la casa que no resulta creíble. 

En definitiva, “Glass” logra que nos pasemos un buen rato con ella pero parece tan forzada desde su planteamiento inicial hasta su desenlace que solamente llega para confirmar que esto de la trilogía de súper héroes “a la Shyamalan” no tenía pies ni cabeza. 


¿Lo bueno? James McAvoy y todo el suspenso que genera él solo. 
¿Lo malo? Lo dicho, lo forzado del argumento, final incluido.
¿Donde se puede ver? Está en PopCornTime.
3.0: Cumple, se deja ver. 

Otras películas de M.Night shyamalan:
2015: The Visit (La visita) 
  

martes, 9 de julio de 2019

Ghostbusters (2016)

Género: Comedia
Dirección: Paul Feig
Protagonistas: Kate McKinnon, Kristen Wiig, Melissa McCarthy, Chris Hemsworth 
Duración: 110 minutos
Año : 2016 

En tiempos donde las nuevas ideas escasean y prácticamente todo lo que vemos en la industria del cine responde a un copy/paste descarado, enterarme de la realización de un refrito para el clásico “Ghostbusters” de 1986, digamos que mucho no me motivó. Tiempo después me entré que el filme tendría como protagonistas a cuatro mujeres, lo cual algo de morbo instaló en mi, sin embargo, por respeto a la historia me mantuve a distancia por varios años de la película, que el perfume a desastre estaba en el aire. 

Pero al fin llegó la hora y como corresponde, junto a mis hijos, me senté este fin de semana que recién pasó a ver este Ghostbuster 2.0 y grata sorpresa me llevé al encontrarme con un filme que en el global posee más méritos que pecados. En primer lugar, el que la película tenga como protagonistas a cuatro divertidas mujeres, ya es todo un acierto. Son ellas quienes llevan el mando acá y nosotros (hombres) somos meros espectadores, representados/ridiculizados además por una especie de secretario guapo y estúpido (Chris Hemsworth), en un guiño evidente hacia la cosificación histórica que el cine ha ejercido hacia la figura de la mujer. 

Y desde ahí, casi todo acierta (casi, que defectos hay). La historia es dinámica, se nos presentan poco a poco los personajes, los fantasmas que van apareciendo en la ciudad y tenemos a estas científicas que intentan buscar credibilidad en torno al tema. Te ríes, te pasas un buen rato y te emocionas cuando la película realiza evidentes guiños a la cinta original, con apariciones estelares (y muy breves) de Dan Aykroyd, Bill Murray, Sigourney Weaver, el hombre de malvavisco gigante y, por supuesto, pegajoso (Slimer en la versión en inglés).

¿Lo bueno? La sensación de estar frente a una película que algo intentó decir, lo cual por si solo implica un mérito que la coloca por sobre muchísimos pero muchísimos refritos realizados durante todos estos años. 

¿Lo malo? Ciertos sin sentidos en la aparición de armas extraordinarias creadas con no se que dinero ni tecnología o un guión que a ratos se vuelve algo empalagoso, sobretodo tras la aparición de un antagonista bastante débil. También me parece que los “personajes clásicos” que aparecen en la película no son tan bien utilizados como podría haber sido.

¿Donde se puede ver? Está en Netflix.


3.5: Muy buena!

miércoles, 22 de mayo de 2019

Saló o 120 Días De Sodoma (Italia, 1975)

Género: Drama erótico (?)
Dirección: Pier Paolo Pasolini
Protagonistas: Paolo Bonacelli, Giorgio Catardi, Umberto Paolo
Duración: 115 minutos
Año : 1975

Me ha costado escribir acá últimamente, sin embargo, días atrás me encontré en PopCornTime con este clásico, la última y controvertida obra del escritor dramaturgo italiano Pier Paolo Pasolini y bueno, tenía que volver acá para escribir respecto a lo revisado, me refiero por supuesto a "Saló o 120 días de Sodoma", con seguridad una de las películas más enfermas que he visto en mi vida (si es que no la más). Y es que directores controvertidos uno ha visto, cineastas capaces de situarnos en lugares incómodos en el que no queremos estar pero que acabamos disfrutando, sin embargo, hasta el más retorcido de estos parece un niño de pecho al lado de la ausencia de moral que Pasolini transmite en la dirección de la que fue su última película.

La trama de "120 días de Sodoma" es simple y su relato en general bastante plano, sitúa su historia en la localidad de Saló en la Italia nazi de los años 40 (primer guiño político que la película realiza) en donde cuatro personajes poderosos secuestran a dieciocho jóvenes (hombres y mujeres) a quienes deciden al interior de una mansión someter a una serie de abusos violentos, sexuales y degradantes, con la ayuda de una serie de ex prostitutas y un grupo de "soldados" (subalternos a cargo también de ellos). De esta forma la cinta se divide en cuatro segmentos, un "Antes del infierno" donde observamos como estos cuatro personajes deciden iniciar el ritual compartiendo entre si a sus hijas, el secuestro de los jóvenes y el dictado de reglas (prohibido el rehusarse a realizar algún acto o mencionar la palabra Dios dentro de la mansión, entre otras) y luego tendremos un "Círculo de las manías" donde cada ex prostituta comienza a realizar un relato (de abusos y violaciones sufridas en su infancia principalmente), lo cual excita a estos cuatro personajes y les provoca realizar cuanto acto les de la gana realizar. En este momento comenzamos a observar la ausencia de moral tanto en los personajes como en la dirección de Pasolini, acá absolutamente todo está permitido, cualquier tipo de perversión y abuso. Pasaremos luego al "Círculo de la mierda", donde a raiz de un relato todos en escena deben comer mierda (tal cual) y una finalización a cargo del "Círculo de la sangre", el cual relata el cierre de todo este ritual y presenta las escenas más violentas de la película. 


Ahora, realizando un análisis más profundo, resulta evidente el que para esta película Pasolini utilizó la controversia como gancho, es decir, intentó generar polémica con escenas absolutamente explícitas para que el mundo se interesara en su mensaje. ¿Y este cual es? Principalmente uno: la ausencia absoluta de moralidad en el ser humano cuando este cuenta con impunidad en el poder. Ahí la crítica se hace evidente desde los apodos con que estos cuatro personajes se hacen llamar ("presidente", "magistrado", "duque" y "obispo", poder político, judicial, real y eclesiástico). Yendo más al fondo hay muchos simbolismos que vuelven a esta película un plato tan asqueroso como exquisito (¡tremenda contradicción!), el como los abusados comienzan en algún momento a delatarse con tal de sobrevivir, un guardia que es asesinado pero antes de morir alza el puño comunista dejando perplejos a estos poderosos por algunos segundos o esa fantástica escena final en donde dos soldados, frente a la masacre presenciada, comienzan a bailar un vals, representando con esto la naturalización de la violencia por parte de las masas, el individualismo y la indolencia que el capitalismo comenzaba a instalar en la sociedad (no debemos olvidar que Pasolini era comunista, dato relevante en todo este análisis de autor). 

En definitiva, a simple vista una película horrenda visualmente (que lo es), grotesca hasta decir basta y cargada de efectismos pero en el fondo una obra compleja y riquísima en cuanto a mensajes y simbolismos. Una película desafiante, de esas que te marcan.

¿Lo mejor? Todo el trasfondo que la cinta oculta bajo la mugre.
¿Lo peor? Las actuaciones son poco creíbles en general (las de las víctimas principalmente), el montaje deja mucho que desear (aunque hay que recordar que es una película de 1975) y el desarrollo es bastante monótono.
¿Donde la encuentras? En PopCornTime 

4.5 : Brillante!

viernes, 22 de febrero de 2019

BlacKKKlansman (2018)

Género: Comedia negra. Verídica.
Dirección: Spike Lee
Protagonistas: John David Washington, Adam Driver
Duración: 128 minutos
Año : 2018

En la linea de lo que le conocemos, Spike Lee vuelve a colocar el tema racial sobre la mesa. Lo hace metiendo mano a la historia de Ron Stallworth, el primer policía negro en la localidad de Colorado Springs y quien además logró infiltrarse en plenos años 70 en la organización del Ku Klux Klan. El tenor, sin embargo, que la película aborda (desde su primera escena) es cercana a la comedia negra y en un tono en general ameno. Durante gran parte de su trayecto, por tanto, "BlacKKKlansman" se muestra como una película de espionaje bastante divertida y que, sobretodo durante su primera mitad, consigue avanzar con una dinámica bastante atractiva. Cuenta además con actuaciones que convencen, destaca (aunque sin deslumbrar) Adam Driver mientras que John David Washington está en el rol del clásico negro divertido. 

(Atención: spoiler desde acá) Y hasta ahí, todo bien. Pero es en la recta final donde el asunto te da el mazaso. De pronto con una habilidad tremenda Lee abandona la caricatura, nos trae bruscamente al presente y nos recuerda que el racismo no es cosa del pasado, que la historia no se ha terminado de construir, golpeando y dejándonos helados frente a la pantalla. Cerrando así una película que ya tan solo por esos diez minutos finales se transforma en un imprescindible de ver. 

¿Lo mejor? Los diez minutos finales. Fantásticos.
¿Lo peor? Que el tono de comedia en ocasiones vuelve algo inverosímil el argumento. A ratos no te crees que la historia haya sido así de absurda.
3.5 : Muy buena!